sábado, 8 de agosto de 2009

Que exageración!

Cuantas posibilidades hay que escriba una entrada cada dos semanas y se me pierda el archivo… Si fueses yo, muchas.
He perdido una entrada… Me parece que su nombre era Brisa… Aquella entrada que no encontré mi pendrive porque la tenía en la PC del trabajo, ahora no está tampoco por acá, solo queda mi casa, pero sinceramente no es seguro, a quedado como Lo que el viento se llevó jaja, agrio mi chiste de La Brisa pero es que no tengo idea de donde está! Y me gustaba =(

El día de hoy vengo con una entrada que poco o nada tendrá de conclusión, es solo algo que ha andado vueltas por mi cabeza.
Los libros, las películas, series y también canciones… Ciertas de esas situaciones que tu lees, ves o escuchas y dices “que exageración!”, y:
a) No lo comprendes hasta que te sucede y ves que no es tan exagerado como te parecía.
b) O estos manipulan nuestra mente, juegan con nuestro subconsciente, para que cuando nos suceda, esa exageración la convirtamos en realidad.

Estoy más inclinada por la primera, y es que aunque me encantaría comenzar a divagar con una teoría extraña e incomprensible sobre los medios de comunicación, el poder de nuestra mente y la manipulación de nuestra psiquis, definitivamente mi balanza se inclina un poquito más del lado A.

Y es que todo eso que alguna mente creó (llámese escritor, guionista, libretista o como sea…) no salió de ninguna parte, ciertamente tiene su origen y es visto y llevado a través de una manera que forme una historia de interés. Con su punto de vista, claro está, pero eso no le quita el origen a las situaciones y sobretodo en temas tan comunes como lo son la Amistad y el muy cliché Amor.

Todo eso simplemente es la vida y cualquier exageración puede no serlo, cuando te pasa a ti, o cuando te pasó a ti y ahora le pasa a alguien cercano a ti. Cuando te das cuenta de que la vida es así y dices “hey, yo no estaba tan loca, la gente pasa por lo mismo”; cuando tenías una actitud irracional de tu parte (aunque tu sabías que era así) pero no podías evitarlo; y luego ves como espectadora (no de una peli, ni de un libro, sino de tu alrededor) como esta actitud o parecida se repite; cuando no puedes describir algo sin que suene a que lo sacaste de una película y te enredas tanto que no sabes ni de lo que estabas hablando y te ríes como la niña tonta que viste en alguna serie; cuando piensas “Oh Dios, parezco esas chicas estúpidas de las pelis” y antes pensaste que eso era una exageración.

Entonces, estoy tentada a pensar que no hay exageraciones, sino apreciaciones limitadas.
Tiene mucho que ver la forma de ver las cosas (si eres del tipo calamardo o del tipo arenita jaja no se me ocurrió nadie mejor que calamardo), tiene que ver la forma en que vives la vida (con libertad, o con auto-represiones), tiene mucho que ver con lo que para ti es una exageración porque aunque creas conocer hasta que punto algo sería normal, talvez eso no es así.

Entonces podría decir que he vivido ciertas exageraciones, y temiendo estar loca las he reprimido hasta posiblemente de mi propia cabeza, pero ahora veo que no estuve loca en sentir que las vivía sino en haber pensado que Eso Era Exagerado.

Y si se animan, me cuentan una. (Dale, que las prefiero por Messenger, hay más interacción –y como reírme a la par que lees como me río-)
N/a: No será risa de burla, lo prometo.
Yo no lo he hecho porque quien me lee me conoce (a menos que sea un internauta perdido) y; o bien -en pocos casos- las conoce, o bien no se las he contado -ni pienso hacerlo-.
Déjenme ser, déjenme estar! =)

No hay comentarios.: